El inicio de un nuevo curso escolar no solo trae consigo el reencuentro de alumnos y profesores, sino también la llegada de nuevos integrantes a la comunidad educativa. Para conocer en profundidad cómo se desarrolla este proceso, hablamos con Antonieta Lara, coordinadora de Secundaria del colegio Bética-Mudarra, quien nos explica en detalle las unidades de acogida que implementan en su centro para garantizar una integración fluida y efectiva.
Acogida para alumnos nuevos: Un proceso personalizado
La llegada de nuevos alumnos es un momento crucial tanto para las familias como para el colegio. Desde el primer contacto, en Bética-Mudarra se pone especial atención en ofrecer una experiencia personalizada. Antonieta nos cuenta:
"Aunque tenemos jornadas de puertas abiertas, nos gusta que el proceso de admisión sea más individualizado. Nos tomamos el tiempo de atender a las familias de forma personal o telefónica, ya que creemos que este contacto directo ayuda a que se sientan cómodas desde el principio."
Una vez se publica la lista de admitidos, el colegio no pierde tiempo en dar la bienvenida a las nuevas familias. A través de una invitación al centro, los alumnos y sus padres tienen la oportunidad de conocer de primera mano las instalaciones y, lo más importante, a sus futuros compañeros. Además, se realiza un "tour personalizado" por el colegio, en el que los alumnos futuros compañeros de los niños de nuevo ingreso explican cómo es el día a día en sus aulas y actividades.
"La idea es que los nuevos estudiantes conozcan el colegio desde dentro, que vean cómo funciona todo a través de los ojos de sus futuros compañeros. También es una oportunidad para que los padres conozcan al profesorado, orientadores y equipo directivo," señala Antonieta.
Pero el proceso no termina con la reunión inicial. Durante las primeras semanas de clase, el equipo docente realiza un seguimiento individualizado del progreso de cada alumno, observando cómo se adaptan tanto académica como socialmente. La unidad de acogida, que concluye en octubre, es un momento clave para analizar cualquier dificultad que puedan estar experimentando y actuar en consecuencia. Si se detecta algún problema, el colegio contacta rápidamente con la familia para trabajar conjuntamente en la solución.
"Nuestro objetivo fundamental es que los nuevos alumnos se sientan acogidos desde el primer momento. Queremos que esta transición sea lo más suave posible" recalca.
Acogida de nuevos profesores: El papel del "mentor"
La incorporación de nuevos profesores también es un proceso cuidadosamente planificado. En el colegio Bética-Mudarra, cada nuevo docente es asignado a un "mentor", un profesor con experiencia y afinidad en su área o nivel educativo que lo acompaña durante su primer año en el centro.
"El mentor es una figura clave en la integración del nuevo profesor. No solo le ofrece apoyo en el ámbito profesional, sino también en lo personal, ayudándole a entender la dinámica del colegio, las metodologías y brindándole un apoyo constante," comenta Antonieta Lara.
Esta figura de apoyo garantiza que el nuevo docente tenga un punto de referencia al que recurrir para cualquier duda o necesidad. El proceso de acogida para los profesores busca que se sientan cómodos en su nuevo entorno laboral desde el primer momento, permitiendo que puedan concentrarse en ofrecer lo mejor de sí a los alumnos.